¿Está protegida nuestra privacidad en las redes sociales?
Cuando accedemos a entrar en el mundo de las redes sociales, estamos cediendo datos de carácter personal, abriendo las puertas al mundo a nuestra privacidad. Cuando accedemos a esta exposición y a la vez, ofrecemos públicamente información personal, debemos tener en cuenta cuáles son los riesgos que esto puede comportar.
Cuando nos creamos un perfil público en una red social se debe consentir una serie de permisos de privacidad del perfil y condiciones de uso. Muchas veces esta información la encontramos en formato de letra pequeña y normalmente no invertimos la atención ni la reflexión que esto merece. Esto, en un futuro, puede tener posibles consecuencias.
Las redes sociales, a través de la información que vamos depositando día tras día en la nube, muchas veces de manera inconsciente, van configurando un perfil cada vez más definido de nuestra persona. A través de este perfil o mapa de conocimientos e información, muchas empresas y negocios pueden beneficiarse e invertir directamente en usuarios que ya conocen.
Las redes sociales tienen sus propias políticas y estándares de privacidad que tratan de adaptarse a la normativa vigente en protección de datos. La verdad es que nuestros datos personales están protegidos por leyes, pero al final dependerá más de lo que nosotros mismos estemos dispuestos a proteger.
¿Cuáles son las leyes que regulan la privacidad de los datos personales en Internet?
Existen dos leyes que regulan la privacidad de la información sobre los datos personales de los usuarios en Internet:
- La Ley Orgánica de Protección de Datos Personales ((LOPD): establece el régimen jurídico aplicable al tratamiento de datos de carácter personal y las condiciones en las que se deben recoger, tratar ceder dichos datos para no infringir los derechos fundamentales y las libertades públicas de los usuarios.
- Ley de Servicios de la Sociedad de la Información y Comercio Electrónico (LSSI): establece las obligaciones a cumplir en caso de tener una pagina web o tienda online encaminadas a proteger los derechos de los consumidores.
La información es poder
Tal y como dijo Francis Bacon: “la información es poder”. Nos encontramos en la era de la información. Uno de los activos más valiosos que tienen las empresas acerca sus usuarios es la información.
Internet y sus dispositivos ofrecen cada segundo información de sus usuarios cada vez que navegan por la red. Estamos constantemente creando y cediendo información sobre nosotros, nuestros gustos, nuestros lugares, nuestros movimientos, nuestras compras… La información se ha convertido en el activo del siglo XXI.
Toda la información que no paramos de generar como usuarios de la red, es almacenada, registrada, analizada, estudiada y gestionada, para conocernos mejor. De esta manera, se intuye y se puede predecir nuestra toma de decisiones y así, maximizar producción, adaptar horarios, tramitar pedidos. ¡Todo por el negocio! Estamos hablando de toda aquella información que acaba configurándose en lo que se denomina Big Data.
¿Redes sociales, a qué están obligadas?
Los proveedores de servicios de redes sociales están obligados a respetar ciertos principios. Es por eso que deben:
- Informar a los usuarios de su identidad y proporcionarles información transparente y completa sobre las finalidades y la manera en la que se tratará los datos personales.
- Ser respetuosos con la intimidad. Las políticas de privacidad deben ser claras y dar la posibilidad de que el usuario pueda escoger hacer su perfil totalmente privado.
- Informar a sus usuarios de los riesgos de atentado a la intimidad cuando estos ofrecen datos a los Servicios de Red Social SRS.
- Recomendar a sus usuarios de no publicar imágenes o información de otros sin su consentimiento.
- Ofrecer un servicio de atención al cliente o una oficina de reclamaciones que cubra cuestiones de protección de datos.
- Establecer plazos máximos de conservación de los datos de los usuarios inactivos y suprimir las cuentas abandonadas.
- Adoptar medidas para los menores.
Nuestra huella, el objetivo de las empresas
Hoy en día la presencia de las empresas en un entorno digital forma parte de su negocio. A través de ella aumentan su visibilidad y generan beneficios.
Cuando nosotros como usuarios nos registramos en las redes sociales y recibimos información de amigos y seguidores lo hacemos en un entorno doméstico, excluido del cumplimiento de la normativa de protección de datos. Sin embargo, cuando es una empresa la que se registra en estas redes sociales y recibe información de sus contactos lo hace con ánimo de lucro y, en este caso, sí está obligada al cumplimiento de la LOPD.
Plataformas como Facebook, Google o empresas como Amazon dedican parte de su tiempo y negocio en recoger información de sus usuarios para conocerlos mejor y elaborar perfiles de comportamiento. De esta forma, saben en qué están interesados sus usuarios y como invertir sus ingresos para inferir directamente en ellos y su voluntad.
Las empresas que recogen información tienen obligaciones a cumplir:
- Deben informar al usuario de la recogida de datos y obtener su consentimiento
- Deben informar y tener el consentimiento del usuario de sus derechos de acceso, rectificación, oposición, supresión, limitación y portabilidad antes de publicar sus datos personales o utilizarlo en su propio beneficio.
- Deben garantizar el cumplimiento de los deberes de secreto y seguridad y asegurar que en sus relaciones con terceros que le presten los servicios, que comporten el acceso a datos personales, se cumpla lo dispuesto en la LOPD.
- Deben disponer y poner a la disposición del usuario el Aviso inicial de la Política de Cookies y el enlace de la Política de Cookies general, el Aviso legal y la Política de Privacidad.
- Cuando la empresa este enfocada al comercio, esta tienen que poner a la disposición del usuario las Condiciones de Uso.
- Deben informar si se recoge información del usuario y como se va a utilizar en caso afirmativo.
Consejos para el usuario: como proteger tus datos personales en las redes sociales?
- Navegar pos sitios seguros
- Usar contraseñas seguras y irlas cambiando.
- Familiarizarse con el panel de privacidad: establecer las normas que uno quiere y no las que vienen por defecto.
- Limitar la visibilidad de la información que se comparte: contactos seguros.
- Avaluar si la información que se comparte es coherente, ética y pública
- Repasar la red de contactos: que el alcance de nuestros datos no vaya más allá de las personas con las que uno quiere compartirlo.
- Utilizar WiFi privadas. Evitar conectarse a redes públicas. En caso de hacerlo, evitar realizar operaciones personales como transacciones bancarias.
- Actualizar el antivirus.
- Desconectas las sesiones que se inicien.
- Proteger los teléfonos móviles.
- Controlar todos los mensajes que se reciben en el email y evitar abrir los desconocidos.
Pero sobretodo, tener ética y principios con uno mismo, saber que lo que compartes ya nunca volverá a ser privado y respetarte a ti y a tus familiares y amigos.