Todo sobre el streaming
Todo sobre el streaming.
Seguramente has oído hablar del streaming. ¿Pero realmente sabes en qué consiste y cómo funciona? En este artículo te contamos todo sobre el streaming, y también qué necesitas para poder realizarlo, ya sea desde tu casa o de manera profesional.
¿Qué es el streaming?
Empecemos por el principio, porque si bien es un término que hemos oído todos, pocos sabemos explicar realmente de qué se trata.
El streaming es simplemente una transmisión de datos, que se envían desde un servidor a un cliente. A medida que el cliente va recibiendo esos datos, los va consumiendo automáticamente en un flujo continuo a través de una red. Esto permite que la reproducción comience mientras se envía el resto de los datos. Por ejemplo, tan pronto como su PC o teléfono recibe el principio de una película, puede comenzar a verla. Mientras la película se está reproduciendo, el resto de la información es transmitida.
Mediante el streaming podemos escuchar música o ver vídeos sin necesidad de descargarlos completos. Esto se logra mediante fragmentos enviados secuencialmente a través de la red (como lo es Internet) lo que reduce drásticamente los tiempos de espera.
Por ejemplo, Netflix es uno de los servicios de streaming más popular, que les permite a sus clientes ver una gran variedad de contenido de forma ilimitada.
¿Cómo funciona el streaming?
Si queremos contarte todo sobre el streaming, debemos contarte cómo funciona:
Primero nuestro ordenador (el cliente) conecta con el servidor y éste le empieza a mandar el fichero. El cliente comienza a recibir el fichero y construye un buffer donde empieza a guardar la información. Cuando se ha llenado el buffer con una pequeña parte del archivo, el cliente lo empieza a mostrar y a la vez continúa con la descarga. El sistema está sincronizado para que el archivo se pueda ver mientras que el archivo se descarga, de modo que cuando el archivo acaba de descargarse el fichero también ha acabado de visualizarse. Si en algún momento la conexión sufre descensos de velocidad se utiliza la información que hay en el buffer, de modo que se puede aguantar un poco ese descenso.
Si la comunicación se corta demasiado tiempo, el buffer se vacía y la ejecución el archivo se cortaría también hasta que se restaurase la señal. Este es el caso que ocurre cuando por ejemplo un vídeo de Youtube se interrumpe por unos segundos. Simplemente se está llenando el buffer de nuevo hasta que hay suficientes datos para reanudar la reproducción.
Las empresas que proporcionan contenido en streaming necesitarán servidores o plataformas en la nube para el almacenamiento. Los grandes actores, como Netflix, disponen de redes de envío de contenido que mantienen el contenido más popular en caché y cercano al punto adonde se transmitirá, a fin de reducir la latencia y los costes de ancho de banda.
Como consumidor de contenido en streaming, necesitarás una conexión a Internet fiable con una velocidad suficiente. Al menos 2 Mbps (megabits por segundo) para proporcionar una buena experiencia de streaming (lo que significa no sufrir retrasos o reducciones de la calidad). Mientras transmite contenido, los datos se envían al buffer, que guarda los siguientes segundos o minutos de la canción o programa. Si tu conexión es demasiado lenta, constantemente se producirán pausas mientras tu dispositivo almacena en el buffer. Si desea ver contenido en HD o 4K, deberías disponer de una conexión aún más rápida, de al menos 5 Mbps.
Generalmente los servicios más comunes del streaming son los de audio y vídeo, ya que son tipos de archivo pesados, que requieren enviar gran cantidad de datos y por tanto necesitan bastante tiempo para su transmisión.
Para consumir un vídeo entonces tendríamos dos modalidades:
Sin streaming: entonces tendríamos que esperar a que el vídeo esté descargado por completo en nuestro ordenador. Una vez que tengamos el archivo completo, podemos reproducirlo.
En la mayoría de los casos, solo podrás comenzar a ver o escuchar una vez que la descarga haya finalizado. Y una vez que tengas el archivo, este ocupará espacio en tu disco duro. Si deseas utilizar muchos medios grandes (como películas en HD), esto podría ocupar rápidamente todo el espacio disponible en tu disco. El streaming, por contra, reproduce medios sin descargar el archivo, por lo que no se comerá espacio en tu disco.
Con streaming: Comenzamos a transferir el vídeo y a reproducirlo en el mismo instante que tengamos ya descargados los primeros segundos. A medida que se va reproduciendo el vídeo se va descargando el contenido siguiente, al mismo tiempo que se reproduce, consiguiendo que la reproducción se realice al mismo tiempo que la descarga.
Obviamente la experiencia de usuario del streaming es mucho mejor, pero también permite mejores servicios y más seguros, ya que el cliente no recibe nunca el vídeo en su ordenador, evitando la posibilidad de contaminación del archivo, o la copia.
Servicios de streaming muy conocidos son Youtube (casi podríamos decir que es el pionero de los sitios de vídeo que se transmiten por streaming), Vimeo, Netflix, etc. En el terreno del audio tenemos a Spotify o Amazon Music. Son solo unos ejemplos destacados, pero hay cientos de ellos.
Streaming vs. Livestreaming
Dentro del streaming se pueden distinguir dos tipos de categorías. Por un lado estarían las retransmisiones en vivo de un evento, lo que se conoce como livestreaming. Por otro lado, las plataformas también permiten el llamado streaming media para emitir vídeo o audio sin necesidad de que sea en directo.
¿Cómo funciona el streaming en vivo o livestreaming?
El streaming en vivo funciona de forma parecida al de otros tipos de contenido, pero se usa, sobre todo, para eventos especiales, como deportes o debates políticos. Cuando ves una transmisión en vivo, visitas un sitio web (como un sitio de noticias) alojado en su servidor web. Este se conecta a un servidor de medios, que envía el contenido a tu dispositivo usando el protocolo de transporte en tiempo real (RTP por sus siglas en inglés) y el protocolo de transmisión en tiempo real (RTSP). Esto permite que los archivos de vídeo se envíen en un formato más pequeño (comprimido) y después se verán con mayor calidad (descomprimidos) en su dispositivo.
Mientras la estas viendo, la transmisión se guarda temporalmente y se muestra en pequeñas cantidades de datos en tu dispositivo, luego se descartan. Así, nunca recibirás el archivo, solo las partes que necesitas en cada momento para su reproducción.
Recientemente, las plataformas de las redes sociales han comenzado a incorporar elementos de streaming en vivo, como Facebook Live e Instagram Live.
La diferencia entre la transmisión en vivo y los servicios de streaming como YouTube y Netflix, por ejemplo, es que, en el vivo, el vídeo es visto al mismo tiempo en que es registrado, lo que permite que el productor de contenido interactúe con la audiencia, responda comentarios, etc.
A pesar de ser un contenido hecho para ser consumido instantáneamente, esos vídeos también pueden ser mantenidos en la línea del tiempo para que otras personas los vean después.
Este verano, debido al Covid y a la prohibición de eventos multitudinarios, y cierre de locales como teatros, cines y centros cívicos y culturales, los streamings en vivo ganaron territorio en muchos de estos sucesos.
Un ejemplo que encontramos es el pueblo de Esparreguera, donde se realizaron transmisión de eventos en vivo por streaming, como la Repicada de Campanes, Castell de Focs y varios conciertos de música, desde el Canal de Youtube del Adjuntament.
¿Qué se necesita para transmitir en vivo?
Si queremos contarte todo sobre el streaming, no podemos dejar de contarte cómo puedes hacer tu para realizarlo.
La transmisión en vivo no requiere mucha inversión, basta que tengas una cámara que grabe en HD (alta definición), una red de Internet, y listo. (Puedes leer nuestro artículo sobre Youtubers para más información).
Una ventaja de la actualidad es tener la posibilidad de aprovechar los teléfonos inteligentes ya que una función imprescindible es su cámara. Esta muchas veces tiene casi el mismo impacto que si utilizaras un equipo profesional de grabación, pero se debe considerar las necesidades del proyecto para determinar cuál la mejor opción para lograr tu objetivo.
Si quieres hacer tu contenido más profesional, tienes que tomar algunas precauciones y contar con otro tipo de material:
– Equipo de Grabación de Vídeo. Tener un equipo de grabación genera un contenido más profesional y da la imagen de mejor calidad, pero esto varía dependiendo las necesidades de cada proyecto.
– Micrófono. Dependiendo del giro y la intención de transmisión se debe considerar el micrófono como un factor importante o no tanto. Si el objetivo de la transmisión es visual, se puede cargar en texto los mensajes con mayor énfasis. A mucha gente no le importa ver vídeos de mala calidad, pero no se puede decir lo mismo del audio pues este factor compromete la comprensión del asunto.
En vídeos editados, se puede activar la opción de subtítulos y transcribir el guión. Pero en el caso de la transmisión en vivo, si el espectador no entiende lo que tú estás diciendo la única solución para él es dejar de ver la transmisión.
Aunque estés grabando en un ambiente silencioso, la cámara capta todos los ruidos externos, y por ser una grabación en vivo, solo verás el resultado de esta interferencia después que la transmisión haya comenzado.
La solución para este problema es simple: necesitarás solo un micrófono de solapa y un cable usb conectado al ordenador o celular. Pero no te preocupes, la inversión no pasará de 15 euros. Con esto, tu transmisión ganará mucho en calidad.
– Switcher de video. Al realizar un streaming profesional, debes tener en cuenta implementar un switcher de video, donde se sumen tus cámaras además de algún otro input de video, como gráficas, presentaciones o inclusive vídeos MP4.
– Dispositivo de transmisión y grabación. Es un dispositivo que sirve para transmitir un evento en directo mientras simultáneamente se graba una versión maestra de mayor calidad para la edición o el archivado posterior. Existen diferentes ofertas en el mercado y es una opción cuando parte de tu estrategia es el streaming.
– Ordenador. Es necesario una interfaz final para gestionar el contenido ya sea una PC o Mac. Siempre puede ser opción en lugar de un encoder profesional, utilizar una computadora con software de transmisión y grabación.
– Servicio o Proveedor de streaming. Éste hará de intermediario entre tu y el espectador.
– Página Web o Reproductor. Será donde tus espectadores tendrán que entrar para poder ver tu transmisión en vivo. Puede ser tu propia Web, o una que permita transmisiones en vivo, por ejemplo Youtube.
Más cosas para tener en cuenta si quieres hacer vídeos en vivo más profesionales:
Iluminación
Para hacer tu transmisión en vivo, puedes optar por la luz natural o por la iluminación artificial, pero en ambos casos es necesario tomar algunas precauciones para que las imágenes no salgan borrosas, oscuras o granuladas.
En el caso de la luz natural, hay algunos horarios más favorables para la grabación, como el período entre las 8 y las 10 de la mañana, cuando el sol está más débil y la luz no forma sombras duras en el rostro de quien está grabando.
Ahora, los ambientes iluminados artificialmente son más previsibles y controlables. Se pueden montar esquemas de iluminación artificial usando equipos que tengas en casa y cambiarlos de lugar, en caso de que quieras producir efectos diferentes en tu audiencia.
Internet estable
Parece básico, pero mucha gente se olvida de este detalle primordial. Con una conexión de Internet mala, tu transmisión se interrumpe todo el tiempo, el audio puede salir cortado, y tú ni te das cuenta, pues estás demasiado ocupado grabando.
Claro que se puede hacer una transmisión en vivo usando un paquete de Internet 4G. Pero, recomendamos que solo comiences la transmisión si tienes acceso a una red estable, segura y de preferencia con buena velocidad, al fin de cuentas, debes poner en primer lugar la experiencia de tu espectador.
¿Cuáles son las ventajas del livestreaming?
El streaming permite acercar los contenidos a los usuarios únicamente con la utilización de un ordenador o de un dispositivo móvil.
Ruptura de las barreras geográficas y temporales
Como es lógico, la retransmisión a través de la red permite que cualquier persona con conexión a Internet, independientemente del lugar donde se ubique, pueda visualizar el contenido. Sumado a ello, temporalmente tampoco hay limitaciones, ya que el evento se puede seguir en directo, pero también es posible redistribuirlo en diferido.
Mayor interacción
Desde el ámbito empresarial, la retransmisión de eventos en directo permite al espectador comentar el contenido con el resto de los usuarios conectados. De esta forma, el flujo de comunicación es más abierto, el usuario siente que es parte activa en el proceso de producción y en el éxito de la emisión.
El vídeo atrae más
Intentando crear contenidos cada vez más atrayentes para sus seguidores, muchas empresas y emprendedores comenzaron a invertir en transmisiones en vivo además de los posteos fijos en los feeds de sus redes sociales.
El vídeo te acerca a tu audiencia
En la transmisión en vivo, tus seguidores tienen la oportunidad de conocerte mejor, lo que hace el diálogo más dinámico y personalizado. Durante la transmisión, también puedes aclarar dudas en tiempo real.
Cuando demuestras que estás interesado en la experiencia de tus clientes y te dispones al diálogo, sin límite de preguntas, cortes y ediciones, aumentas el nivel de confianza que los clientes tienen en tu producto.
Contenido variado
Las amplias posibilidades del streaming hace que no solo se puedan transmitir vídeos, sino que deja la puerta abierta a otras vías de comunicación dependiendo de las necesidades informativas del cliente o empresa, por ejemplo:
- Emisión de radio por Internet (radio online)
- Retransmisión de eventos puntuales
- Retransmisión de música en directo
- Emisión de conferencias, cursos online, seminarios.
¿Qué tipo de contenidos se pueden transmitir?
Música y otro audio
El streaming de audio, incluyendo música y podcasts, se ha vuelto increíblemente popular. La música en streaming le permite reproducir montones de canciones de diferentes artistas, todo ello sin tener que descargar ni un solo archivo. Los servicios como Apple Music, Spotify y Pandora proporcionan millones de pistas disponibles en streaming con solo tocar un botón.
Vídeo
El vídeo fue el primer éxito masivo de streaming, comenzó con servicios como YouTube. En lugar de tener que descargar grandes archivos multimedia, el streaming de vídeo comprime los datos en pequeños paquetes y los envía a tu dispositivo, donde se descomprimen y se reproducen. Durante una sesión de streaming, el vídeo se guarda en el buffer constantemente; mientras estás viendo un paquete de datos, el siguiente está en proceso de descompresión para que puedas ver toda la película o el programa sin cortes.
Juegos y aplicaciones
El juego en streaming o en la nube funciona de forma similar al streaming de audio o vídeo. Ahorra espacio y recursos de procesamiento en sus dispositivos descargando al servidor de juegos de una empresa; lo único que debe hacer es conectarse de forma inalámbrica. Cuando juegas de esta forma, básicamente estás enviando comandos a un equipo que los ejecuta y transmite el resultado de vuelta a tu dispositivo. Solo recientemente han aumentado lo suficiente para hacer este proceso viable en tiempo real.
¿Y tu ya te has animado a transmitir en vivo alguna vez?
Cuéntanos cómo fue en los comentarios!